Recientemente trascendió que el influencer Alexander Otaola realizó una fiesta de Halloween en su rancho, como suele hacer hace ya algún tiempo, a la que acudieron muchas personas de renombre en el ámbito de la farándula de Miami. Este año la celebración se basó, fundamentalmente, en las deidades de la mitología griega.
En varios videos y fotos publicadas en las redes sociales aparecen los invitados recorriendo el rancho con disfraces que recreaban a los principales dioses del Olimpo, una muestra de creatividad y estilo verdaderamente impresionante.
En esta ocasión Otaola lució un traje verde con algunos detalles dorados, eligiendo un accesorio bastante singular para su cabeza, igualmente dorado y con formas puntiagudas, adornado con gemas, que le aportó un aspecto distintivo y elegante, propio de un rey.
Una de las asistentes a la festividad fue La Diosa, quien se presentó con un vestido negro de terciopelo con detalles azules, sumamente fino. La parte superior de dicha prenda de vestir posee un escote compuesto por una tira azul enrollada que termina formando un lazo, impregnándole a la misma un toque femenino y glamuroso.
El locutor Yunior Morales, por su parte, optó por disfrazarse de un magistrado o senador de la antigua Roma, luciendo una túnica blanca corta con detalles dorados en la parte superior e inferior de esta, así como un cinturón también dorado. Además, utilizó una corona de laurel como complemento y las aireadas, resistentes y cómodas sandalias romanas.
Uno de los invitados que más llamó la atención en la fiesta fue el creador de contenido Rionel Lorenzo, quien cautivó al resto con su asombroso disfraz de Hades, el dios griego del inframundo, el cual ajustó a la apariencia de esta divinidad en la película » Hércules».
Lo cierto es que la celebración permitió al anfitrión y a todos sus invitados dar riendas sueltas a su imaginación en aras de representar a personajes mitológicos, confluyendo a la perfección la elegancia con la fantasía. La velada ofreció a todos los presentes la oportunidad de sumergirse en la cultura de la antigua Grecia y de dar vida a sus dioses, así como de disfrutar juntos de un entorno mágico, en el que no faltaron las risas, la música y el baile. La fiesta. sin lugar a dudas, demostró una vez más la habilidad de Otaola para organizar eventos inolvidables.