Los cancilleres de Estados Unidos y Canadá unieron fuerzas para bloquear la inclusión de Cuba en las aproximas cumbres como pedían otros países de América Latina. Los gobiernos de Estados Unidos y Canadá han estado solos en su posición de no aceptar a Cuba en futuras cumbres a menos que existan cambios democráticos en la isla. El propio presidente de Colombia Juan Manuel Santos dijo en su discurso de apertura que no invitara a Cuba era un «injustificado anacronismo de la guerra fria». El propio presidente Obama dijo antes de partir a Colombia que Cuba no había hecho nada para poder ser invitada a una cumbre de países democráticos.
Varios países de América Latina y en especial los miembros del ALBA amenazaron con no participar en próximas citas a menos que Cuba sea invitada. Por otro lado Estados Unidos estaría dispuesto a tampoco participar en una cumbre donde este Cuba sin antes haber hecho cambios democráticos en su gobierno. Se espera que los presidentes se puedan poner de acuerdo antes de que termine la cumbre pero al parecer las posiciones sobre Cuba están bastante alejadas.
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