Varios abogados de inmigración del sur de Florida están exigiendo que el gobierno federal inicie una investigación contra el que fuera jefe del grupo de apoyo del fallecido dictador Fidel Castro y exmiembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Manuel Menéndez Castellanos quien arribó a Estados Unidos el pasado 15 de agosto beneficiado por el Programa de Reunificación familiar para Cubanos. El ex funcionario de la dictadura llegó en silla de ruedas, camiseta rosada, gorra y una mascarilla al Aeropuerto Internacional de Miami (MIA) donde lo esperaba el periodista Mario J. Pentón para hacerle algunas preguntas.
El abogado de inmigración Willy Allen considera que una vez que se inicie la investigación federal se establecerá por qué pudo ingresar a territorio estadounidense mediante el programa de reunificación familiar teniendo antecedentes que lo vinculan profundamente con la cúpula castrista.
«Yo lo que quisiera ser es número uno, que los congresistas averigüen qué pasó aquí, porque tiene que ser a nivel federal», dijo Willy que añadió que en un supuesto lo pudieron quitar de su pesto laboral hace 20 años atrás, pero eso no quita que él haya hecho daño a las personas ni las cuatro décadas que afectó a la población cubana en Cienfuegos.
Igualmente manifestó que le gustaría conocer quién hizo la aplicación por parte del familiar que lo haya reclamado y que estos se investiguen porque obviamente en las solicitudes preguntan qué tipo de trabajos tenían la madre y el padre.
Por su parte el abogado de inmigración Santiago Alpízar y quien es vicepresidente de Cubademanda y Cubapresión ID, que se encargan de exponer a la luz pública y denunciar las violaciones de derechos humanos en la nación caribeña está de acuerdo en que se inicie una investigación de carácter federal.
Además, su oficina elaboró una carta dirigida al secretario de Seguridad Nacional Alejandro Mayorkas en la que critica la entrada al país de semejante alto funcionario que también tenía responsabilidades en la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) o parlamento cubano y dirigente de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), mientras miles de cubanos cada día huyen de la dictadura para llegar a Estados Unidos y muchos de ellos quedan en un limbo migratorio y temen que los devuelvan a Cuba por tener formularios I-220A e I-220B.
«También estamos enviándole copia a la Casa Blanca para que conozcan la manifiesta de inconformidad que hay aquí en el sur de Florida, especialmente en la comunidad cubana por admitir a un exmiembro del PCC, de la comisión de apoyo a Fidel Castro, donde sabemos todos que era un lugar donde se agenciaban espías para la inteligencia cubana», explicó el letrado.
Alpízar advirtió que a través de esta investigación se pueden detectar varias irregularidades tanto en las solicitudes que hicieron los hijos en Estados Unidos como en los que se llenó por solicitante en este caso Menéndez, que tuvo que hacer una biografía y responder algunas preguntas para informar si va a hacer espionaje o si alguna vez fue miembro de una organización totalitaria y si había perseguido a alguien por razones de religión o ideología.
El proyecto Represores Cubanos perteneciente a la Fundación para los Derechos Humanos en Cuba añadió en la lista negra de represores de cuello blanco al exdirigente partidista de la provincia Cienfuegos, de quien se conoce que en el año 1993 presidió la Comisión de Candidaturas Nacional de la ANPP y es responsable del delito electoral de Denegación de Inscripción de Candidatura, así como otros crímenes de lesa humanidad relacionados a la persecución con fines políticos.
En correspondencia el Instituto Patmos con sede en Washington cuestionó la creciente inclinación a la aprobación de entrada al país norteño de dirigentes y funcionarios de la dictadura cubana a diferencia de miles de personas que sufren en cárceles cubanas por exigir sus derechos y no tienen un programa de refugiados que los proteja del comunismo porque se encuentra estancado hace años en EE.UU.
Una vez que los destituyeron de su cargo como dirigente comunista en la central provincia de Cienfuegos en el año 2003 y enfocarse en la tarea de ser jefe del equipo de apoyo del dictador Fidel, funciones que no se conoce hasta cuando las desempeñó, reapareció después en el programa oficialista Mesa Redonda conversando sobre energía renovables, como director de Energía Renovable del antiguo Ministerio de Industria Básica en el que tiempo después el régimen detectó varios delitos vinculados al fenómeno de corrupción que terminó con varios dirigentes presos y destituidos del cargo.