Después de que un juez federal suspendiera la orden ejecutiva de Donald Trump que bloqueaba la entrada de inmigrantes y refugiados de siete países, una familia que anteriormente no había podido ingresar al país, se alista para intentarlo nuevamente.
El núcleo, que tardó 13 años en obtener la visa que les permitía mudarse a Estados Unidos, está compuesto por cuatro adultos y dos menores, quienes tenían previsto viajar a Allentown, a unas 60 millas al norte de Philadelphia, en Pennsylvania, donde residen parientes que son ciudadanos de Estados Unidos y que habían comprado una casa para ellos.
Tras la firma del decreto presidencial de Trump, la familia arribó al Aeropuerto de Philadelphia pero fueron detenidos, se les revocaron sus visas y tuvieron que regresar, sin poder siquiera contactar a sus parientes.
Los representantes legales de la familia Asali dijeron a NBC 10 de Philadelphia que están arreglando el viaje que los llevaría a Estados Unidos aunque no pudieron ofrecer más detalles del caso.
“De todos los casos que que he negociado para regresar personas a Estados Unidos, este es el que más optimista me he sentido”, aseguró uno de los abogados.