El mes pasado falleciĆ³ el menor Eudis Yanyel Bueno Bec, de tres aƱos de edad, en la barriada La Choricera, en Guanabacoa, La Habana. Al parecer el niƱo saliĆ³ de su casa en horas de la maƱana del jueves 28 de septiembre a jugar con unos amiguitos en el patio de una vivienda cercana y desapareciĆ³ sobre las 11:00 de la maƱana de ese mismo dĆa.
Los padres del menor avisaron a la PolicĆa y al dĆa siguiente concurrieron al lugar varios agentes con perros para realizar la bĆŗsqueda, sin embargo no encontraron nada.
En la maƱana del sĆ”bado 30 de septiembre un vecino conocido como El Guajiro comunicĆ³ a los familiares del pequeƱo que el cuerpo se hallaba dentro de un refrigerador que no funcionaba ubicado en el patio de su vivienda, precisamente donde Eudis habĆa estado jugando. Al llegar el padre a dicha vivienda el refrigerador todavĆa estaba cerrado. En consecuencia resultaron detenidos por la PolicĆa El Guajiro y sus dos hijos identificados como Los Jimaguas.
SegĆŗn las declaraciones prestadas por un familiar de la vĆctima al diario de noticias 14ymedio, se pudo conocer que uno de los involucrados en el hecho manifestĆ³ a un sobrino de los padres del menor que la nieta de El Guajiro, otra niƱa, le habĆa avisado a su abuelo aproximadamente a las 12:00 de la madrugada que el cuerpo se encontraba en el refrigerador y este abriĆ³ el aparato, lo volviĆ³ a cerrar con mucho nerviosismo, y fue a contarle a su hijo. A pesar de tener conocimiento desde ese entonces de que el niƱo estaba muerto, ambos decidieron esperar a las 7:00 de la maƱana para dar a la familia la trĆ”gica noticia. En tal sentido, el familiar entrevistado por el diario, seƱalĆ³: Ā«Ellos llevaban horas al tanto de que el niƱo estaba muerto y no hicieron nadaĀ».
Recientemente, los sujetos presuntamente responsables de este suceso, fueron puestos en libertad, lo que ha generado gran indignaciĆ³n e incertidumbre en los familiares del menor, quienes alegan que hubo asesinato y encubrimiento. Lo cierto es que las autoridades a cargo de la investigaciĆ³n no le han explicado nada a los dolientes. Al respecto el entrevistado expresĆ³: Ā» Ninguna autoridad ha venido al barrio a decir si la investigaciĆ³n sigue o no. Los sospechosos estĆ”n en libertad, cuando deberĆan estar detenidos hasta que cierre el caso.Ā» AdemĆ”s se refiriĆ³ al enorme sufrimiento de los padres ante esta pĆ©rdida y a la insatisfacciĆ³n de los mismos con la labor desempeƱada por las autoridades, recalcando: Ā«… mientras El Guajiro y Los Jimaguas pasan por el frente de la casa y no les pueden hacer nadaĀ». Ā» Se muriĆ³, lo enterramos y es como si no hubiera pasado nadaĀ», afirmĆ³.
Por otra parte, el padre del menor fue acusado por El Guajiro de amenazas y aunque no hubo testigos, debe asistir los martes y jueves de cada semana a una estaciĆ³n de policĆa a firmar un acta.
De acuerdo a la prensa oficialista, la necropsia revelĆ³ que la muerte se produjo por asfixia, no hay signos de violencia, y las investigaciones apuntan a que quizĆ”s fue un accidente, pues alguno de los menores pudo cerrar el refrigerador y como este es antiguo tiene el cierre por fuera, propiciando que Eudis quedara atrapado, sucediendo lo peor.