Alrededor de 25 familias cubanas han convertido a la antigua termoeléctrica Frank País, ubicada en La Habana, en sus casas, según reporta Diario de Cuba.
Fernando Peraza es uno de los hombres que habita en la termoeléctrica, que dejó de funcionar en el año 2001.
«Primero estuvo el antiguo custodio de aquí. Pero el tanque estaba lleno de lona de vidrio y eso le quemó toda la piel. Cuando lo cogí, di manguera de arriba abajo, limpié bien y después abrí los huecos para las ventanas y las puertas», dice.
«Eso no hay quien lo tumbe. Ahí pasó mi mujer los huracanes Ike y Gustav; yo estaba trabajando fuera de La Habana. El mundo cayéndose afuera y ella tranquilita ahí dentro. Ahora vivimos en el antiguo comedor de la termoeléctrica. En el tanque vive una muchacha con su niña», resalta.
Pero la presencia de las familias no es un asunto de ilegalidades.
«En 2004 le empezaron a dar los locales a la gente, pero nunca se hizo el cambio de uso en papeles, declarando que esto se destinaba a viviendas», dice Fernando.
Pero Fernando no es un simple vecino del lugar, él lo conoce mejor que nadie.
«Había mucho trasiego con el petróleo y la gasolina; no de quienes vivimos aquí, sino de gente de fuera. Le resolvimos un espacio a una policía que estaba sin casa para acabar con eso. Aquí vive incluso un dirigente de la Revolución que se divorció y la casa era de la mujer. No tenía para donde ir y le resolvieron aquí», agregó.
Y así fue cómo llegó a la termoeléctrica, lugar que ha convertido en su casa y que está remodelando.
«Estuve casado cinco años con una mujer que tenía una hija. Mi mujer falleció y la hija empezó a buscar la forma de sacarme. Fue al Carné de Identidad; el jefe, que era un policía, me dio de baja. Ella debe haberle dado dinero. Me quedé en la calle», cuenta Fernando su caso.
«La presidenta del CDR me prestó un cuartito debajo de la escalera del edificio, que había fabricado su hijo, pero no tenía baño. Tenía que usar el de ella. Ahí estuve, hasta que vine para acá en 2004. Mira mi carné de identidad, dice ‘sin domicilio conocido ni vínculo laboral'».