Desde el pasado día primero de septiembre La Habana se encuentra bajo medidas estrictas para frenar el contagio del COVID-19.
Desde la 7:00 pm está en vigor un estricto toque de queda y las autoridades han desplegado un fuerte operativo policial para hacerlo cumplir.
Las calles se pueden ver vacías y solo camiones militares y de la policía circulan por las calles de la capital cubana.
Las tropas especiales también patrullan las calles de la ciudad.
El toque de queda debe durar hasta el día 15 de septiembre pero podría extenderse si no se contiene el virus.