José Manuel Albares, ministro de Asuntos Exteriores de España, hizo una petición a embajadas y consulados en el extranjero, estén preparados para el “volumen significativo” de solicitudes de nacionalidad que comenzarán a llegar con la entrada en vigor de la ley de Memoria Democrática.
También el diplomático español dijo que “se reforzaran” aquellos consulados con mayor cantidad de solicitudes, «tomando como referencia de partida los datos de carga de trabajo que en su día generó la Ley de Memoria Histórica».
Algo que agregó el funcionario español, es que sería conveniente crear un sistema de cita previa, pudiendo atender “sin cita” a los hijos e hijas mayores de edad de aquellos españoles a quienes les fue reconocida su nacionalidad mediante la ley de Memoria Histórica.
«Los expedientes presentados por estos solicitantes van a ser relativamente sencillos, al estar formados fundamentalmente por la solicitud, su certificado de nacimiento y el certificado de nacimiento de su padre/madre español. En ese caso, solo se atendería con cita previa a los demás solicitantes», aclara la circular.
Otro aspecto a tener en cuenta, según el Ministro de Exteriores español, sería establecer un turno «especial» de atención, «fuera del horario habitual de atención al público», atendido por los efectivos de refuerzo eventualmente autorizados.
El texto de la citada ley, que fue aprobado por el Senado la pasada semana con 128 votos a favor, 113 en contra y 18 abstenciones, está pendiente de publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y contiene una disposición adicional octava que beneficia a los descendientes de españoles que huyeron de España por la Guerra Civil y el periodo dictatorial del general Franco. Lo que denominan “Ley de Nietos” (que amplía la concesión de la nacionalidad española a los descendientes de los exiliados).
La nueva ley de Nietos, incluida como enmienda dentro de la legislación de Memoria Histórica, se podría adquirir la nacionalidad española por dos vías en el caso cubano:
-La primera, abre la puerta de la ciudadanía a los descendientes de españolas exiliadas que perdieron la nacionalidad al casarse con un extranjero con anterioridad a 1978.
-También se beneficiarán los hijos e hijas mayores de edad de los españoles a los que se les reconoció la nacionalidad de origen en virtud del derecho de opción.
La ‘ley de Nietos’ da un plazo de dos años para entregar las peticiones de nacionalidad con la posibilidad de un año de prórroga, pero fuentes diplomáticas dijeron al rotativo que el aluvión de solicitudes no hará necesaria dicha extensión pues el Gobierno tiene «la urgencia de disponer votantes» cuando se acercan las elecciones.
Estas medidas para agilizar la tramitación de las solicitudes indican «el interés» por parte de Albares para que se agilicen las nacionalizaciones antes del ciclo electoral 2023, informó el rotativo.