El porqué de la no disposición de combustible en La Habana no aparece en ningún medio de comunicación.
En distintas gasolineras de la capital las colas de los vehículos son inmensas esperando la oportunidad de proveerse de los diferentes carburantes.
No obstante, la gasolinera de 17 y L había sido habilitada y una cola de choféres, aguardaba para ser atendida.
En los vehículos estatales, «Después del 34 por ciento, nos empezaron a dar 200 litros y, ahora, además de tener que entregar cada ticket, nos lo van dando de 30 en 30 litros», afirmó un conductor de CIMEX.
«El combustible de motores (motocicletas) está perdido», aseguró un taxista de un Cocotaxi al hablar de la gasolina «regular».
«La verdad es que no hay ni gasolina, ni petróleo ni nada. Aquí donde me ves estoy esperando una carrera directa», expresó un botero a ver si pasa «un par de yumas» que faciliten el dinero y así que se justificara el trabajo de ése día.
El conductor de un viejo auto Moscovich, manifestó que ésta crisis: «Está empeorando la sequía y parece que es para largo».
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