Aquellos hijos de padres cubanos nacidos en el exterior, que deseen obtener la ciudadanía cubana, deberán pasar un riguroso examen, que incluye dominio absoluto del idioma español, conocimientos de historia y de las regulaciones constitucionales en la Mayor de las Antillas.
Al alcanzar la mayoría de edad, los interesados podrán pedir a las autoridades cubanas la ciudadanía, resaltan las nuevas regulaciones migratorias publicadas en la Gaceta Oficial por el Gobierno cubano, si son capaces de demostrar que:
1) Han mantenido “lazos permanentes y relaciones estables” con la Isla por espacio de dos años antes de iniciar el trámite de naturalización.
2) “Aprueben el examen de ciudadanía” que será elaborado por el Ministerio de Educación.
Al decir de las autoridades isleñas, los objetivos que busca el examen son:
“Comprobará, entre otros aspectos, que el interesado habla con claridad el idioma español y lo entiende sin dificultad; conoce las regulaciones constitucionales sobre la organización política, administrativa y social del país; los símbolos nacionales; los derechos y deberes ciudadanos; los períodos históricos y sus principales líderes; las características geográficas del país y los conocimientos generales actuales del acontecer nacional”.
Seguramente los aspirantes hijos de cubanos, tendrán que dejar adoctrinar sus cerebros por el castrismo, tal y como lo hace el régimen con los niños de primaria y secundaria.
Las nuevas medidas han entrado en vigor desde el 1 de enero de 2018.
(Con información de Martí Noticias)