El Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba concluyó que el accidente aéreo en La Habana fue un fallo humano.
«La causa más probable del accidente fueron las acciones de la tripulación y sus errores en los cálculos de peso y balance, que conllevaron la pérdida de control y desplome de la aeronave durante la etapa de despegue», dijeron las autoridades cubanas en un comunicado.
El accidente ocurrido en La Habana dejó un total de 112 muertos y solo quedó una sobreviviente.
El avión accidentado, un Boeing 737 de Global Air, arrendado por Cubana de Aviación, tenía casi 30 años de explotación.
Comunicado del Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba
Referente al lamentable accidente ocurrido el 18 de mayo de 2018 con la aeronave B-737-200, matrícula XA-UHZ, de la aerolínea DAMOJH S.A, fletada con su tripulación por la empresa Cubana de Aviación, la Comisión Investigadora determinó, según los datos aportados por los registradores de vuelo (cajas negras) de la aeronave y el resultado obtenido de la caracterización de los estándares aeronáuticos para este vuelo, que la causa más probable del accidente fueron las acciones de la tripulación y sus errores en los cálculos de peso y balance, que conllevaron a la pérdida de control y desplome de la aeronave durante la etapa de despegue.
El Instituto de la Aeronáutica Civil de Cuba reconoce la cooperación de todo el pueblo y de las instituciones durante la investigación, así como de la Junta Nacional de Seguridad del Transporte, el fabricante Boeing de Estados Unidos y la autoridad aeronáutica de México.