Israel Rojas crítica a Sandro Castro, y exalta legado de Fidel: «La grandeza no es hereditaria»

La oficialista revista Alma Mater se ha hecho eco de la opinión del cantautor cubano Israel Rojas de Buena Fe, sobre el vídeo viral de Sandro Castro, nieto del fallecido dictador Fidel Castro, exhibiéndose en las redes con un automóvil Mercedes Benz.

Rojas calificó a Sandro como «irresponsable, «grosero» e «irrespetuoso», además de sugerir que era «estúpido e inmaduro».

«Me mandan un video de un joven, presumiendo de la velocidad que agarra su vehículo en la carretera. Un carro en Cuba es un artículo que en el imaginario colectivo, pareciera que distingue y ubica en la cima de la jerarquía social. Aún hoy se identifica como un premio de vanguardias. Evidencia de éxito económico. Privilegio de pocos. Nada digo que sea nuevo», dijo en un inicio el cantante.

Luego admite tener un auto también, y haber pasado «sinsabores» para adquirirlo.

«…Muchos excelentes profesionales, mejores que yo en su sector, les ha sido (y les será) imposible adquirir un medio de transporte que merecen y necesitan. Y eso está muy mal. Entonces, creo que semejante video es cuando menos grosero, irresponsable e irrespetuoso», añadió.

«No obstante, esto sería sólo la estupidez de un inmaduro, de las muchas que pululan en redes sociales, de no ser porque el protagonista es un nieto del Comandante en jefe Fidel Castro», sostiene.

«¿… Y? Este país no es una monarquía. La grandeza no es hereditaria. Se puede ser brillante aunque se nazca en cuna de paja. O un mentecato, aunque se nazca en cuna de oro. Los que con acciones insustanciales, como los registrados en este video, alimentan la maquinaría del odio contra Cuba, deberían saber cuanto daño hacen a su país y cuanto favor tributan a los que jamás les perdonarán su apellido», indicó.

Israel justificó luego el hecho, alegando que no todo el mundo tiene la estirpe de un Panchito Gómez Toro, teniente de la Guerra de 1895, con la que se logró que Cuba dejara de ser colonia de España.

Rojas también comparó a Sandro Castro con el coronel José Francisco Martí y Zayas Bazán, quien «participó en la masacre de los independientes de color en aquel triste 1912, nada menos que como Jefe del Estado Mayor del Ejército».

«Se registró el asesinato de entre 2000 y 6000 negros y mestizos, protagonistas de un alzamiento antirracista. Soy mestizo. ¿Acaso voy a dejar de ser martiano por eso? Los verdaderos hijos y nietos morales de las grandes figuras históricas de Cuba y de la humanidad, están ahora mismo trabajando en los centros de aislamiento. En las tareas más importantes. En los afanes más sensibles. En la búsqueda de soluciones e ideas positivas para el desarrollo del país. Eso creo», concluyó.

«No hay peor ciego que el que no quiere ver, no se me haga el bruto por favor, el vídeo no es para cuestionar al niño 🤑, …», comentó una internauta identificada como Martha María Vallina.

«Que Revista Alma Mater se preste para esto es inclasificable. Sandro Castro es el exhibicionista de los lujos de una familia que ha desangrado Cuba… su abuelo el primero», puntualizó Ania Liste Aguiar.

«…El problema no es Sandro. Da lo mismo el show que monten ahora para «sacrificarlo» y sancionarlo con dos semanas en algún cayo sin redes sociales. El problema es que tenemos una familia y sus allegados dirigiendo un país como si fuera de su propiedad. Ese es el problema que tenemos que acabar de resolver y no entretenernos con los cebos que nos tiran ellos mismos», se lee en un comentario publicado por el perfil Libertario Libertad.

También ayer, Alex Castro Soto, hijo del difunto dictador, y tío de Sandro, posteó en Facebook, donde casi nunca publica, un comentario que hace clara alusión al vídeo que se filtró en las redes, comparando a su sobrino con una «papa podrida».

«Una papa podrida No indica que todas las papas del saco estén malas, revisar bien es de sabios», escribió Castro Soto.

Sin embargo, muchos cubanos se preguntan, qué diferencia a Sandro, de su prima Vilma Rodríguez, nieta de Raúl, quien rentaba hace poco más de un año una lujosa propiedad en la plataforma Airbnb, o de Tony Castro con sus viajes exóticos, incluso de Mariela Castro, quien dilapida en una cena con langostas mientras el pueblo no tiene que comer.