Inspirados en películas y programas de televisión estadounidenses, los jóvenes cubanos han puesto de moda en la Isla las fiestas de Halloween, según reporta AP.
La costumbre de que los niños pidan dulces de puerta en puerta aún no se ha establecido en Cuba. Sin embargo este fin de semana muchos alumnos de primaria, secundaria y universidad han disfrutado —con disfraces y bailes— de la fiesta de Halloween.
El aumento de la popularidad de esta festividad es una de las muchas manifestaciones de las décadas de entrelazamiento de las culturas de Cuba y Estados Unidos, a pesar de medio siglo de hostilidades entre los gobiernos de ambos países.
Los cubanos están inmersos en la cultura popular estadounidense y cada vez más en los productos norteamericanos que conocen cuando algún familiar que vive fuera visita la isla.
Los cubanos «celebran como pueden», y es que los disfraces varían desde los más caros (importados) hasta otros hechos en casa con objetos comunes.
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