La sudafricana Demi-Leigh Nel-Peters, de 22 años, se convirtió este domingo en la nueva Miss Universo, tras vencer en la final de este concurso de belleza celebrado esta noche en Las Vegas (EEUU).
Esta es la segunda vez en la historia del certamen que una sudafricana logra la anhelada corona, tras la victoria que obtuvo su país en 1978 gracias a Margaret Gardiner.
La joven natural de Sedgefield recibió la corona de la francesa Iris Mittenaere, que ganó el título de Miss Universo de 2016.