Desde que comenzó a aplicarse el programa de parole humanitario el año pasado, muchas de las personas involucradas han manifestado su insatisfacción debido a las demoras en el procesamiento de las solicitudes. Ayer el equipo de Telemundo 51 acudió al Aeropuerto Internacional de Miami y comprobó la existencia de familias que iniciaron el proceso hace más de un año y que han tenido que esperar 14 meses para obtener una respuesta.
Una mujer que patrocinó a algunos de sus familiares manifestó: «Estoy muy emocionada. He estado esperando un año. Ellos son del 12 de enero. Un año y casi dos meses. Es muy emocionante. Llevo ocho años en este país, tratando de que ellos estén aquí conmigo, y finalmente lo logramos. Gracias al Parole».
Estas son las primeras familias en arribar a territorio estadounidense a través del mentado beneficio migratorio luego de que el juez James Tipton desestimara la demanda presentada por fiscales de estados republicanos cuya pretensión consistía en la eliminación del mismo, una decisión judicial que constituye un triunfo para la administración actual. Al respecto uno de los beneficiarios reveló: «Tuvimos mucho miedo… estuvimos un año a la espera de si lo quitaban, que sí, que no. Muy, muy desesperante».
Lo cierto es que entre la gran mayoría de los implicados se generó una gran incertidumbre motivada por la decisión que adoptaría un juez designado por la anterior administración y por la lentitud del programa como resultado del elevado número de solicitudes pendientes de procesar.
No obstante, numerosas personas continúan sin recibir ninguna notificación por parte del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS), por lo que han solicitado ayuda con el fin de reencontrarse con sus seres queridos, insistiendo en que no se convertirán en una carga pública para el gobierno.
En cuanto a la posibilidad de incrementar la celeridad en el proceso tras la decisión judicial de mantener la vigencia del programa, un portavoz del Departamento de Seguridad Nacional destacó: «Desde que se anunció el programa, fuimos muy claros en que se tramitarán 30,000 casos al mes, y eso es lo que se ha hecho. Es decir, no habrá cambios ni en la velocidad ni en cómo se procesan los casos: 50% según la fecha de aplicación y 50% al azar».
Sin embargo, las esperanzas se han renovado y muestra de ello son las declaraciones realizadas por una de las familias favorecidas: «Es que son demasiadas personas, pero estamos aquí y es una prueba más de que está llegando».
Otro patrocinador afirmó: «El día de mi cumpleaños me dieron la noticia de que vendrían (mis familiares) … no quería más regalos para ese día».
Si bien la batalla legal por la permanencia del programa de parole humanitario no ha culminado, pues se espera que la fiscalía estatal de Texas eleve el asunto al quinto circuito de apelaciones, hasta el momento este sigue ofreciendo a los ciudadanos de los países contemplados la posibilidad de ingresar a la nación norteña de forma legal, ordenada y segura, y consecuentemente, de reunirse con las personas allegadas a ellos.
