Una botella con un mensaje dentro fue lanzada al mar desde Cuba por una cubana pidiendo por sus hijos a Yemayá, y fue encontrada un año y varios meses después en la costa gallega.
La singular botella fue encontrada el pasado 16 de noviembre por un gallego acostumbrado a hacer sus paseos por la costa, al verla la recogió y para su sorpresa vio que guardaba unas monedas y un papel.
Secundino Vicente Refojos, más conocido por Dino, descubrió que se trataba de un mensaje escrito en el papel algo deteriorado por el paso del tiempo, que traía además cinco centavos, que le costó a él y su familia varios días descifrar lo que estaba escrito.
«Tenía dentro cinco monedas de un centavo cada una y dos papeles, lo que pasa es que estaban mojados y muy deteriorados. Los llevé para casa para secarlos y separarlos, aunque fue una operación un poco complicada», dijo Dino al medio local TeleMariñas.
Eunice Moreno Díaz,, fue la madre cubana que desesperada imploró protección para su familia a Yemayá, en agosto del 2022, mientras hacían la travesía hacia Estados Unidos.
«Le pedía a la Virgen que protegiera y acompañase a sus hijos y a sus parejas, y especialmente a sus dos nietos, Carolina y Luciano. También imploraba misericordia y bienestar para ellos y que la travesía hacia Estados Unidos fuese segura y lo más rápido posible. Además de que no pasasen ni hambre, ni sed, ni frío», dijo Dino en sus declaraciones al medio antes mencionado.
La misiva que recorrió más de 6,700 kilómetros en un año y tres meses decía:
“Querida madre Yemayá. Aquí está tu hija, que quiere hacerte una petición…”, “Usted, que es la diosa del mar, la protectora de la familia y de la vida, pido que, con la misma fuerza y amor que yo le dedico estas palabras, todos lleguen a su destino”, “Llevan en México diecisiete días esperando una visa humanitaria que les permita transitar por el país […] Le pido, madre, usted que es tan grande y poderosa, que los guíe y los proteja en lo que les queda de travesía para que sea tranquila y segura y lo más rápido posible. Que no pasen hambre, sed ni frío y que la policía no les pare y que, si sucede, ya tengan sus papeles porque están transitando por un país totalmente desconocido», según fragmentos del mensaje transcritos por La Voz de Galicia.
Dino, aún conserva la botella en su casa pero pretende devolverla al mar, según dijo porque es donde debe estar por tratarse de una ofrenda personal.