La escritora cubana Zoé Valdés ha escrito un emotivo mensaje que habla un poco de la tristeza del exiliado, con sus publicaciones siempre polémicas, muy a su manera la novelista opositora ha dejado ver brevemente las cosas que no le perdona a la dictadura castrista, que le robó mucho tiempo con su ser más querido, su madre.
“Lo que no perdonaré nunca no es que no me permitan regresar, porque en definitiva no me interesa en lo más mínimo. Lo que no perdonaré jamás es que cuando lo haga, en caso de que se reúnan mis condiciones y no la de ellos, ya mi madre no podrá estar nunca más esperándome en el balcón de la calle Empedrado”, escribió.
“Foto del balcón de mi casa en Empedrado 505, hecha por un amigo en Facebook. Ahí me esperaba mi madre todas las noches, o yo a ella”, publicó junto a la foto.
“Observo la foto detenidamente, y recuerdo a mi madre en el balcón, tirándome la llave, a altas horas de la madrugada, cuando yo regresaba de alguna fiesta oculta en una azotea”, añadió.