Los jugadores de ambos equipos pusieron todas sus ganas en el terreno, pero los Astros dominaron el juego en un choque inolvidable.
El jardinero George Springer corrió las bases colmado de exaltación, luego de haber pegado cuadrangular de dos carreras contra Brandon McCarthy, relevista, en un momento decisivo del juego, el undécimo episodio.
“Ha sido el juego más loco de mi vida y apenas es el segundo juego”, dijo Springer. “Pero al final conseguimos la victoria que era lo que perseguíamos”, añadió.
Los Dodgers habían girado el péndulo a su favor en la novena de Marwin González con dos palos de vuelta entera seguidos de José Altuve y Carlos Correa en la décima.
Los Astros de Houston y los Dodgers de Los Ángeles se combinaron para establecer un récord del Clásico de Octubre con ocho cuadrangulares en un mismo partido.
El equipo de los Ángeles abrió la 10ma con otro bambinazo, esta vez de Yasiel Puig ante Ken Giles, y luego empataron por boleto a Logan Forsythe, avance a segunda y hit de Kike Hernández.
Pero los Astros de “El Yuli” remontaron un par de veces, forzaron a extrainnings y derrotaron a los Dodgers de Puig, siete carreras por seis, y el juego impuso un nuevo récord de jonrones (8) para juegos de Serie Mundial.
El abridor de los Astros, Justin Verlander declaró “un clásico instantáneo y ser parte del mismo es muy especial”.
Dave Roberts, de los de los Dodgers, comentó: “Estos jugadores son capaces de muchas cosas y lucharon hasta el último out”, agregando, “este fue uno de esos juegos en que nos quedamos cortos”.
Pero los Dodgers no bajaron los brazos en ningún momento, empataron mediante un jonrón del pelotero cubano Puig al abrir el décimo, e intentaron remontar al final del juego, aunque su intento se vio frustrado.
Tras una noche de gran emoción, la serie se traslada a Texas, reanudándose el viernes en el Minute Maid Park de Houston.
(Con información de El Nuevo Herald y Cubanet)