El opulento yate Utopía IV impactó el puente que se encuentra cerca de la terminal de Virgin Voyages de Miami, tras ser arrastrado ligeramente por las corrientes de agua que provocó un crucero que obtenía apoyo de varios remolcadores.
La publicación de «lifestyle_miami» precisa que el navío cuando procuraba pasar por debajo del puente, lo golpeó: «Anoche, el Utopía IV intentó pasar el puente por la terminal de Virgin Voyages mientras un crucero navegaba y era asistido por remolcadores. La combinación entre los remolcadores y las hélices de popa de los barcos puede empujar una corriente loca y lavar el agua desde todos los ángulos. No hace falta decir que el Utopía IV lo agarró corriente y golpeó el puente bastante bien».
Los internautas de que siguen esta cuenta de Instagram plantearon sus impresiones al respecto, entre las que podemos señalar: «Ahora sabemos lo que pasó con Utopía I, II y III», «¿No podría haber ido más lejos para pasar por debajo del puente?», «No hace falta decir que Utopía V llegará pronto», «El hecho de que tengas una licencia de capitán no significa que seas un buen capitán, el 70% de los capitanes con licencia conducen peor que los que no la tienen».
El comunicado refiere que este yate cuenta con varios percances a lo largo de los años, provocando pérdidas millonarias y refleja que: «Hace casi 2 años, el Utopía IV chocó contra el petrolero «Tropic Breeze» frente a las Bahamas. El impacto hizo que el petrolero finalmente se hundiera. El accidente resultó en casi $7.9 millones en daños. Los investigadores concluyeron que la causa de la colisión fue que ambas embarcaciones no mantenían el aspecto adecuado».
Utopía IV es un yate de lujo que se construyó por Rossinavi en 2018. Tiene una eslora de 63 metros y un calado poco profundo de 2,2 metros 12. El yate es propiedad de JR Ridinger, fundador y director ejecutivo de Market America, una empresa de comercio electrónico que utiliza un modelo de marketing multinivel para vender una variedad de productos. El yate puede acomodar hasta 12 invitados y 14 miembros de la tripulación. Está propulsado por cuatro motores MTU que impulsan cuatro hidrojets, lo que le da una velocidad máxima de 33 nudos y una velocidad de crucero de 26 nudos. Su alcance es de más de 2.500 millas náuticas y está valorado actualmente en 50 millones de dólares, además posee un coste operativo anual de entre 2 y 5 millones de dólares.
El propietario se enfrenta a demandas de miembros de la tripulación y terceros, muchos de los cuales tienen reclamaciones legales contra el barco por lesiones y salarios impagos. El mismo se negó a pagar los salarios y las facturas médicas de la tripulación, y el barco está ahora a la venta mientras persisten demandas pendientes en su contra.