Médico cubano que reside en EE.UU. critica la actitud pasiva de Irela Bravo en entrevista con Otaola

El médico cubano Alexander Raúl que reside desde 2021 en Estados Unidos publicó en su cuenta personal de Facebook un escrito en el que critica la actitud relajada que mostró la actriz cubana Irela Bravo durante la entrevista con el influencers Alexander Otaola en su programa «El Mañanero».

Comenta el doctor que no ejerce todavía su profesión en el país norteño que en Irela visualizó a esa generación que tiene miedo aceptar los errores que cometieron otros aun cuando la verdad es evidente. Al respecto expresó: “En Irela vi a la generación culpable, a la generación que tiene un profundo remordimiento por los errores cometidos. Vi a esa generación cobarde que aun con la verdad dándole en la cara, se niega a aceptar que su vida se basó en la mentira más adoctrinada”.

Considera que vio en ella una cierta tranquilidad de bordear temas escabrosos para que no entorpezcan en su retorno algún día a la isla, a pesar de saber lo que sucede en ella. En tal sentido expresó en su escrito: “Vi el oportunismo de alguien que no quiere quedar mal con nadie, vi a esa parte de Cuba que negaría su más profundo deseo y pensamiento para poder volver».

Refiere que en Bravo apreció el miedo al igual que otros a decir la verdad, aunque él lo esperaba porque hace tiempo que necesita estar bien con el régimen de la isla y con sus seguidores del exilio. En tal sentido escribió en el texto: En Irela vi miedo a la verdad y complicidad con la mentira. Fue Irela decepción esperada, no hubo sorpresa, no hubo ilusión. Desde su primera frase se sabía que Irela no quiere quedar mal con la Dictadura, porque quiere volver, y tampoco con el exilio por sí tiene que quedarse».

Detalla el médico cubano que como Irela Bravo hay millones de cubanos incluso en Estados Unidos que «hay que educarlos y enseñarles el valor de la verdad o aprender a lidiar con la hipocresía de tener que sonreírles la mentira». El texto que detalla la verdad, aunque sea fuerte y los comentarios de sus amigos son prueba de ello.

En el apartado de los comentarios se pueden leer los siguientes: «El problema de esta señora es que no está ni con Dios ni con el Diablo; es como la hoja del Caimito y no tienen definición propia de decir es bueno o es malo, pero bueno a cada cual se le llega su hora», «Ella se mantuvo cautelosa con sus comentarios por miedo a perder en los dos lados, sin saber que ya perdió con la dictadura porque concederle una entrevista a Otaola es una sentencia en sí», «

En el apartado de los comentarios se pueden leer los siguientes: «El problema de esta señora es que no está ni con Dios ni con el Diablo; es como la hoja del Caimito y no tienen definición propia de decir es bueno o es malo, pero bueno a cada cual se le llega su hora», «Ella se mantuvo cautelosa con sus comentarios por miedo a perder en los dos lados, sin saber que ya perdió con la dictadura porque concederle una entrevista a Otaola es una sentencia en sí», «Aún no he visto la entrevista pero ya me imagino el trapaleo que formó para quedar bien con todo el mundo», «Siempre esquivando las preguntas, ambigüedad en su máximo esplendor, cuidando sus palabras, nunca se enteró de nada de lo que pasaba, vivía en un mundo paralelo».

Ciertamente Irela esquivó muy sutilmente alguna de las preguntas del controvertido influencers cubano tales como temas de presos políticos en Cuba o la falta de libertades. No obstante, admitió que su estancia por estados unidos fue petición de su madre quien le dijo que aprovechase los años que le quedan por vivir. Con respecto a las manifestaciones del 11 de julio de 2021 expresó la actriz que ella se encontraba en EE.UU. de visita y que sintió mucho dolor al ver la represión a los jóvenes. Al respecto le comentó a Otaola: «Yo estaba en EE.UU. y no me sentí bien. Me dio dolor ver a esos jóvenes y la violencia con la que se procedió […] Solo salieron a manifestarse, no a matar a nadie».

Irela enfatizó que en su vida nunca obtuvo beneficios de nadie que todo lo que logró fue por su propio profesionalismo y capacidad para superarse en el mundo del arte. La actriz llegó en diciembre al país norteño una vez más, pero en esta ocasión pretende hacerlo por más tiempo y participará en el programa humorístico «La Habana en Hialeah» interpretando su papel de «Cachita», junto a otros excelentes actores que se radicaron en el país.