La presidencia de Costa Rica informó, a través de un comunicado, que el país no cuenta con las condiciones para permitir el ingreso de migrantes cubanos desde Colombia, como lo hizo meses atrás.
Costa Rica detendrá e iniciará un proceso de deportación a los migrantes cubanos que entren al país de manera irregular.
«Ante su inminente llegada a Centroamérica, el Gobierno costarricense reitera que el país no cuenta con las condiciones para permitir su ingreso como lo hizo a finales del 2015 y principios de este año, debido el mantenimiento del cierre de la frontera con Nicaragua y la presencia en territorio nacional de más de 2.000 migrantes de otras nacionalidades», destacó el comunicado.
Las autoridades costarricenses tienen orden de aprehender e iniciar la posterior deportación a su país de origen de todas aquellas personas que se encuentren en el territorio costarricense en condición irregular.
La crisis migratoria en Centroamérica comenzó el 15 de noviembre de 2015, cuando Nicaragua le cerró la frontera a los cubanos al aducir riesgos para la soberanía del país.
Costa Rica entregó visas temporales a 7.802 migrantes cubanos que quedaron varados en su territorio, y el 18 de diciembre de 2015 decidió no dar más de esos documentos, porque se había agotado su capacidad para brindarles asistencia humanitaria en una treintena de albergues que habilitó para ese fin.
En marzo de este año el presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, despidió a uno de los últimos grupos de migrantes cubanos que salió de ese territorio, tras cuatro meses de estar varados en este país en su ruta migratoria a Estados Unidos.