La millonaria casa en la playa de Melbourne en Florida que costó más de 2.3 millones al presentador cubano Alexander Otaola no solo un paraíso por su belleza sino por el impacto en la vida silvestre en la zona.
Esta joya de la costa no solo se destaca por su belleza, sino también por su ubicación privilegiada, enclavada en una reserva natural de reproducción de tortugas marinas que cada año se reúnen en la playa para desovar.
La propiedad ofrece acceso a una playa privada que no solo brinda un espacio exclusivo para disfrutar del sol y las olas, sino que también actúa como un enclave vital para la vida silvestre. Durante los meses de verano, los visitantes pueden presenciar el fenómeno natural de las tortugas que emergen de las profundidades del océano para construir sus nidos en la arena.
Además, la ubicación de la propiedad permite la observación de delfines en sus aguas y el tránsito de ballenas durante su migración, cada vez más común en esta región. Este entorno vibrante y rico en biodiversidad convierte a la propiedad no solo en un hogar, sino en un santuario para los amantes de la naturaleza y los que buscan escapar del bullicio de la vida urbana.
Situado a un breve trayecto en coche del Centro Espacial Kennedy de la NASA, este lugar es perfecto para los amantes de la aventura y el descubrimiento científico. Imagínese pasar una tarde relajante en la playa y luego embarcarse en un emocionante viaje al espacio exterior, todo en un solo día.
Desde antes de su adquisición la propiedad en la playa ya estaba dando de qué hablar cuando el presentador cubano transmitió varios programas desde el lugar. Desde su compra el interés por la zona ha crecido sobre todo dentro de la comunidad cubana residente en Estados Unidos que sigue a Otaola.
Para Otaola la adquisición de la casa no es solo un paso hacia un estilo de vida más lujoso; representa un compromiso con la preservación y el respeto por la naturaleza. Su elección de este lugar destaca la importancia de proteger nuestros recursos naturales y espacios vitales.
Melbourne, Florida, es una de las áreas más hermosas y naturales de la costa este de los Estados Unidos, y es conocida por sus playas, su vibrante vida marina y su rica biodiversidad. Entre las especies que habitan en estas aguas, las tortugas marinas ocupan un lugar destacado. La preservación de estas criaturas es crucial no solo para el ecosistema local, sino también para la salud del océano en su conjunto.
Los residentes y visitantes de Melbourne pueden contribuir activa y positivamente a la preservación de las tortugas marinas de varias maneras:
- Respetar los nidos: Si encuentras un nido de tortuga, ¡no lo toques! Mantén una distancia segura y notifica a las autoridades locales.
- Mantener las playas limpias: Recoge cualquier basura que encuentres en la playa y participa en limpiezas comunitarias.
- Reducir el uso de plásticos: Utiliza bolsas reutilizables y evita productos de un solo uso que puedan terminar en el océano.
- Apoyar a organizaciones locales: Contribuye a iniciativas de conservación o únete a grupos que trabajen en la protección de las tortugas marinas.
