En la mañana de este jueves se presentó por primera vez ante un juez el hombre de Pembroke Pines, tras ser acusado del salvaje asesinato de su hija de dos años. Se negó la libertad bajo fianza.
A Durán, acusado de asesinato en primer grado y abuso infantil agravado que resultó en la muerte de su hija, se le negó la libertad bajo fianza por el cargo de asesinato y se le concedió una fianza de 500.000 dólares por el cargo de abuso infantil.
El miércoles, se publicó la llamada al 911 en relación con el caso. El informe policial indicó que la abuela de Jerónimo Durán, sospechoso de 33 años, se encontraba en completo estado de desesperación mientras intentaba alertar a los operadores del 911 sobre la situación.
Durante la llamada, la angustia de la mujer se vuelve tan abrumadora que le cuesta comunicarse efectivamente con el operador, lo que hace necesario la ayuda de un intérprete de español.
“La niña está pálida, ayuda por favor”, implora la mujer en la llamada. “Acabo de llegar, señorita, mande una ambulancia, necesito algo rápido. La niña está sin conocimiento”
Poco después, la mujer informa al operador que los paramédicos han llegado al lugar y la llamada finaliza de inmediato.
El martes Durán fue detenido por el presunto asesinato de su hija de dos años. La policía de Pembroke Pines acudió al llamado sobre una niña con heridas en 400 Southwest 177th Avenue alrededor de las 9:42 am.
Cuando los agentes llegaron al lugar, descubrieron a una niña de 2 años con una grave lesión en el cuello con abundante sangrado. La pequeña fue trasladada de urgencia al hospital Memorial Regional, pero falleció trágicamente poco después.
La detective Yalile Nader de Pembroke Pines informó que a la llegada de los paramédicos, rápidamente llevaron a la niña que no respondía al hospital. Trágicamente, el hospital les informó más tarde que la niña de dos años había fallecido.
Tras la inspección, los oficiales notaron un corte significativo que iba del lado izquierdo al derecho del cuello de la niña. Dentro de la casa encontraron un cuchillo ensangrentado.
Durán fue llevado a la cárcel del condado de Broward, donde espera juicio por un delito grave: asesinato en primer grado.
Según consta en los registros públicos, Durán participó en una disputa de paternidad, donde la madre de la niña solicitó a un juez la custodia de la menor, argumentando que Durán padecía problemas de salud mental. Sin embargo, en marzo, la pareja llegó a un acuerdo que luego fue aprobado por un juez.
La comparecencia de Durán ante el tribunal se retrasó debido a problemas médicos, lo que provocó que se reprogramara la audiencia.
En 2013 la pareja inició su relación, que llegó a su fin en marzo del año anterior. La madre decidió mudarse con su bebé de 15 meses, citando en documentos legales que el comportamiento de Durán fue descrito como «errático, agresivo, violento y peligroso» tanto para ella como para su hija.