Nueva propuesta de la TSA podría introducir cambios asociados a la fecha límite en que deberán comenzar a aplicarse las regulaciones de la REAL ID

Foto: Video de YouTube de Univision Noticias

La Administración de Seguridad del Transporte ha lanzado una propuesta normativa que podría introducir cambios en cuanto a la fecha límite en que deberán comenzar a implementarse las regulaciones correspondientes a la REAL ID.

La fecha límite establecida es el 7 de mayo de 2025 y hasta el momento la misma se mantiene, pero la mentada agencia pretende llevar a cabo un plan de aplicación gradual de los requisitos asociados a la REAL ID que prolongará por dos años más su uso a nivel general.


No obstante, es válido aclarar que ello no implica que los viajeros no precisen de su REAL ID hasta el 2027.

En un comunicado la TSA advirtió: «Los viajeros sin una identificación que cumpla con la REAL ID u otra forma de identificación aceptable después de la fecha límite del 7 de mayo de 2025 podrían enfrentar demoras en los controles de seguridad del aeropuerto», agregando que es probable que se les realicen advertencias o que tengan que enfrentar «consecuencias progresivas» al carecer de una identificación que se ajuste a las reglas de la REAL ID.

El administrador de la TSA, David Pekoske, señaló: «La TSA está trabajando con el público, otorgando licencias a jurisdicciones y estados para facilitar una transición fluida hacia la aplicación de REAL ID a partir del 7 de mayo de 2025».

Igualmente, recalcó: «La REAL ID proporciona una mejora de seguridad importante, y esta norma nos permite planificar una variedad de escenarios para ayudar a minimizar el impacto potencial para los viajeros, las partes interesadas de la industria y los estados durante la implementación».

La regulación propuesta prevé que las agencias federales puedan implementar las disposiciones de la REAL ID mediante un plan de cumplimiento por fases, aunque por ahora no ha quedado definido cómo se llevará a cabo dicho plan. La TSA sugirió como una alternativa autorizar a tales agencias a emitir «avisos de advertencia» que funcionarían como un mecanismo de «tres strikes» a fin de permitir que las mismas «comiencen a aplicar la ley sin negar inmediatamente el acceso a las personas con una identificación que no cumpla con los requisitos en la fecha límite de aplicación basada en la tarjeta».


La iniciativa en cuestión contempla el siguiente modus operandi: «Las agencias pueden optar por referirse al aviso emitido a una persona que presenta una tarjeta que no cumple con los requisitos por primera vez como una ‘advertencia’ y al aviso emitido en una instancia posterior que cuente para el límite de esa persona como ‘asesoramiento’. En la tercera instancia, se le emitiría al individuo una notificación «final» de que su licencia de conducir/identificación emitida por el estado no cumple con los requisitos y ya no se puede usar para el propósito oficial de REAL ID». La agencia federal negaría el acceso al individuo en ese momento y en todas las instancias futuras a menos que el individuo obtenga una REAL ID o presente una forma alternativa y aceptable de identificación».

Dicha entidad también reveló que la propuesta responde al interés de evitar que se les niegue el ingreso a aquellas personas que no cuenten con una REAL ID a partir de la fecha fijada en el venidero año.

En la iniciativa la TSA puntualizó: «Existe una posibilidad real de interrupciones».

La agencia teme que se registre un número considerable de individuos que no posean la REAL ID, de manera que la implementación radical de dichas regulaciones podría conllevar a un colapso de las instalaciones estatales a cargo de este servicio, así como generar ciertas dificultades en los procesos de control de seguridad.

Por ejemplo, el secretario de Estado Alexi Giannoulias expuso que su oficina estaba redoblando sus esfuerzos en aras de lograr que un mayor número de residentes obtuviera una identificación compatible con los requerimientos de REAL ID con antelación a la fecha límite acordada y confesó que se ha suscitado cierta intranquilidad a causa de las demoras en el otorgamiento de las tarjetas.

En declaraciones ofrecidas en mayo a Kye Martin de NBC Chicago, Giannoulias destacó que su oficina está realizando una ingente labor para disminuir la carga de solicitudes existente antes del 7 de mayo de 2025, pero aclaró que los avances no han sido significativos.

Al respecto comentó: «Sentimos presión. Estamos tremendamente preocupados por lo que sucederá el próximo mayo, y es por eso que estamos allí ahora un año antes tratando de convencer a la gente de la importancia de hacer esto antes del último minuto. Nuestras instalaciones se llenarán, y será un problema si la gente no sale y obtiene sus identificaciones REAL ID».

Asimismo, recalcó la importancia de contar con una identificación de este tipo para ingresar a los juzgados y a otras propiedades de carácter público, así como para efectuar viajes nacionales.

En tal sentido expresó: «No creo que la población en general entienda ahora mismo que el 8 de mayo del próximo año, no podrá abordar un vuelo nacional sin una REAL ID o pasaporte. Va a ser un problema para nosotros, un problema para la TSA, y habrá muchos viajeros molestos».

En relación a este complejo escenario la TSA señaló en su propuesta: «Al reconocer estos desafíos y la incertidumbre en la cantidad de personas que las agencias federales pueden encontrar que no tengan una REAL ID u otra identificación aceptable el 7 de mayo de 2025, las agencias federales se beneficiarían de una mayor flexibilidad para implementar la aplicación de las regulaciones de REAL ID de una manera que tenga en cuenta factores relevantes como la seguridad, la viabilidad operativa y el impacto público».

Fue en el 2005 que el Congreso aprobó la REAL ID a raíz de las recomendaciones contenidas en un informe publicado por la Comisión del 11 de septiembre en aras de incrementar la seguridad y combatir el terrorismo y el fraude de identidad, otorgando a los documentos de identificación determinadas características que obstaculizaran su posible falsificación.

A partir del 7 de mayo de 2025 será obligatorio que las personas que deseen viajar dentro del país aporten una identificación compatible con la regulación de REAL ID. También tendrán que hacerlo aquellas que pretendan ingresar a instalaciones de carácter federal y estatal como prisiones y juzgados. Incluso dicho documento será exigido para concurrir a instalaciones de máxima seguridad como plantas de energía nuclear.

Los residentes mayores de 18 años que quieran tomar vuelos nacionales deberán poseer a partir de la mentada fecha una identificación que cumpla con las reglas de la REAL ID u otra forma alternativa de identificación aceptada por el gobierno federal, si no tienen un pasaporte válido.

En el sitio web del estado de Illinois existe un listado de los requerimientos necesarios para conseguir una REAL ID. Es posible acudir a las oficinas del Secretario de Estado para solicitar este tipo de tarjetas, pero es preciso concertar citas para asesorarse sobre los materiales exigidos para conseguir tal identificación.

Los funcionarios competentes han señalado en reiteradas ocasiones que el precio del trámite para obtener una REAL ID es el mismo que el fijado para las licencias comunes.


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