La Habana ha respondido a Washington con un texto del vocero del régimen, Randy Alonso Falcón, publicado en el portal oficialista Cubadebate, y divulgado en Twitter por el designado gobernante Miguel Díaz-Canel.
Alonso Falcón calificó de vergüenza que la administración de Joe Biden, gobierno de la «nación más poderosa del planeta» mostrara preocupación por Luis Manuel Otero Alcántara, «un ciudadano al parecer bien alimentado», según la dictadura, y condene «al hambre y escaseces a más de 11 millones», valiéndose de la vieja excusa del embargo.
It is very shameful to see this concern in the officials of the most powerful nation in the world which viciously condemns more than 11 million Cuban men and women to hunger and scarcity.#NoMásBloqueo #CubaVivahttps://t.co/NyrZZ2y6sJ @cubadebatecu
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) May 3, 2021
El periodista al servicio del régimen continuó también en el intento de desprestigiar al coordinador del Movimiento San Isidro, y seguirlo acusando de estar pagado por Estados Unidos.
Calificó la huelga de hambre de Otero Alcántara como «puro performance», y dijo que según los análisis en el Hospital Calixto García, «los parámetros del paciente no corresponde con los de una persona que manifieste inanición, lo que indica que existía alimentación e hidratación».
La respuesta de Alonso Falcón llega en representación de la dictadura cubana, y en respuesta al tuit de la titular interina de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de Estados Unidos, Julie Chung.
«Estados Unidos está sumamente preocupado por el bienestar del activista cubano @LMOAlcantara y exhorta al gobierno cubano a tomar medidas inmediatas para proteger su vida y su salud», tuiteó la diplomática.