La activista cubana Omara Ruiz Urquiola criticó que la Feria del Libro de Tampa, en Florida, invitara y acogiera a escritores de la Isla, que tienen fuertes vínculos con instituciones oficialistas como el Ministerio de Cultura (MINCULT).
A través de un mensaje publicado en redes sociales, Omara dejó clara su oposición a este tipo de intercambio cultural con los artistas y escritores seleccionados por la dictadura.
«La Feria Internacional del Libro llega a #Tampa, o es en La Cabaña? Ah, no! Es la #diáspora que acoge a las instituciones del #MINCULT. O es el #MINCULT que fija sede en #yborcitytampa? Ya ni sé, da igual en La Habana que en Tampa. La #banalidad del #mal#southwest los trae, pero no me lleva», lamentó Ruiz Urquiola, contra quien pesa una prohibición de entrada a la Isla comunista, por haber sido partícipe de la protesta del 27N junto al Movimiento San Isidro.
«Creo que será mejor en Tampa, porque ya hay más castristas ahí que en la Isla», comentó un usuario identificado como José Benitez.
«En cualquier momento entregan la réplica del yate Granma en Tampa…», ironizó otro emigrado.
«Dos preguntas me surgen. Una, ¿hay un panel especial para esbirros o van a estar intercalados entre gusano y gusano? Y dos, ¿que tienen que ver Sacha y la literatura?», expresó Cesar Pérez, un cubano radicado en Boston, haciendo clara alusión al escritor cubano Francisco López Sacha, intelectual cubano que durante años ha escrito para medios oficialistas como Cubadebate y La Jiribilla, entre otros.
El escritor cubano Francisco Lopez Sacha, fue durante trece años director de la Unión de Artistas y Escritores de Cuba (UNEAC), una institución, que en su totalidad responde a los intereses del régimen, y un defensor a ultranza del castrismo.
Según sus declaraciones ante la prensa en 2021, «ser cubano implica un acto de identificación con la historia».
Asimismo dijo que «fue la Revolución Cubana la que abrió las puertas y le dio cauce popular a la modernidad de la cultura, a la cual arribamos en los años 30 del pasado siglo, pero fue el programa cultural emprendido por la Revolución el que potenció esa modernidad mediante un sistema de enseñanza artística sin el cual no se hubiera garantizado el proceso de continuidad y desarrollo».