La crisis que está experimentando la población cubana con respecto al abastecimiento de medicinas en las farmacias, alcanza en Artemisa a las personas que tienen necesidad de consumir sicofármacos, medicinas que toman por los distintos trastornos siquiátricos que padecen, y que son indispensables para poder controlar su salud mental.
A causa del déficit total de las medicinas, los pacientes afirman que han tenido que dejar de comprar los fármacos prescritos hasta por tres meses consecutivos.
Pacientes de Güira de Melena, se han visto en la necesidad de recurrir a personas que venden los medicamentos en la bolsa negra, este tipo de “droga controlada”, pero a precios elevados, en algunos casos totalmente fuera del alcance de los enfermos.
Cuentan que desde el mes de julio del año en curso, las farmacias con las que cuenta la localidad no han sido surtidas de algunos tipos de medicinas, entre ellos algunos de gran demanda dentro de la población, pero principalmente no han suministrado los sicofármacos para pacientes con patologías de índole siquiátrica, como son Clonazepam, Clobazam, Tirodacina y el Nitrazepam, entre otros.
Entre los perjudicados se encuentra Ricardo Hernández Herrera y su madre, la señora Rosario Herrera, ambos padecen de un cuadro severo de esquizofrenia, y el hijo está afectado por una deformación pronunciada en el lado derecho del abdomen, debido a una mala práctica médica en una cirugía en el pasado; lo cual lo imposibilita en la actualidad de un desempeño normal en la vida.
El hombre relató: “Desde hace tres meses, mi papá y mi hermana están comprando por la calle las medicinas que mami y yo tomamos, a cincuenta pesos (CUP) cada frasco porque no hay en la botica, y si las dejamos de tomar nos alteramos mucho. Mami hace días está mal porque le falta la Tirodacina, que en estos momentos no la han encontrado ni por la calle, ahora; hace varios días que se me acabó el Clonazepam y tampoco me estoy sintiendo bien”.
El paciente prosiguió detallando: “En la farmacia le dijeron a mi hermana esta semana que todavía no había entrado y que estaban a la espera del envío, pero en eso llevan tres meses y nada”.
El enfermo solicita que alguna organización humanitaria no gubernamental (ONG) le de asistencia a su madre y a él.
El significativo atraso de la distribución de los medicamentos, no parece tener solución a corto plazo, y al igual que ésta familia, otros pacientes no sólo en Güira de Melena, en todo el país están sufriendo las consecuencias, lo que puede desencadenar para ellos en una fuerte recaída de su salud mental, personas con ansiedad y depresión tal vez puedan hacerle frente, porque son trastornos más llevaderos, aunque de igual importancia, pero las personas con trastornos más severos, como esquizofrenia y otros, sólo pueden controlar su salud mental a través de sicofármacos; por lo que el riesgo para sus vidas es una realidad.
(Con información de Cubanet)