Julian y Russ Raymond-Sandy, quienes habían viajado a Cuba para celebrar su luna de miel, tuvieron que pasar 36 horas encerrados en un hotel en la Playa Costa Verde, al norte de Holguín, tras la negligencia de la agencia Thomas Cook que no hizo lo posible por sacar a sus clientes de la isla ante la llegada del huracán Irma.
Según reporta Shropshire Star, la pesadilla de la pareja comenzó cuando se enteraron de la tormenta que se acercaba a las costas cubanas.
«Pedimos ser evacuados hace cuatro días, pero se nos dijo que nos quedásemos debido a que no podían evacuar a 2000 personas”, señaló Julian, de 37 años.
Por su parte, Raymond-Sandy dijo que fue un episodio muy traumático.
“Nos encerraron desde las 10:00 p.m. del jueves y no nos permitieron salir hasta las 9:00 a.m. del sábado. Los vientos eran tan fuertes que el edificio estaba temblando y el ruido era horrible. La lluvia azotó contra las puertas de vidrio del patio, que se estaban moviendo. Fue tan aterrador. Las palmeras estaban dobladas, todo lo que estaba suelto volaba alrededor. No le desearíamos esta experiencia a nadie y aún tenemos otro huracán en camino”, narró.
La pareja afirmó que mientras el personal de la agencia de viajes los había ignorado, los trabajadores cubanos del hotel habían sido de absoluta ayuda ante esta situación.