La periodista Catherine Areu Jones fue arrestada en Miami esta semana, acusada de meter a su madre a la fuerza en un centro de vida asistida, para robarle más de $200,000, informó Telemundo 51.
La mujer de 51 años, conocida como «Sherpa liberal» en medios de comunicación estadounidense, y ex columnista del Washington Post, estaba siendo buscada por las autoridades desde junio pasado, pero supuestamente se habría mudado en varias ocasiones a México, a razón de evadir a la justicia.
Areu Jones enfrenta varios cargos entre ellos, explotación a personas mayores, esquema organizado para defraudar, conspiración, secuestro, falso encarcelamiento y uso fraudulento de identificación personal, dio a conocer la Oficina del Fiscal del Estado de Miami-Dade ayer viernes.
Actualmente se encuentra detenida en la cárcel de Miami-Dade, donde permanece sin derecho a fianza.
Según los fiscales, la investigación inició en 2019, luego de que el Departamento de Niños y Familias recibiera informes de que estaba robándole a su madre de 88 años.
Areu Jones utilizó una escritura de renuncia para que el título de propiedad de la casa de la víctima quedara a su nombre en su totalidad, cuando su madre niega haber firmado el documento.
Supuestamente la periodista había presentado quejas ante DFC de que varias personas estaban descuidando o explotando a su madre, y dijo que ella tenía daño cerebral orgánico o demencia.
Ella habría usado un poder notarial revocado para colocar dos veces involuntariamente a su madre en centros de asistencia, de manera que ella era quien usaba el dinero de la anciana.
Al revisar los asuntos financieros de la víctima, los detectives notaron una pérdida total de más de $224,000, incluyendo el desembolso faltante de los ingresos de una hipoteca inversa sobre la casa de la señora.
Tarjetas de crédito de la víctima también fueron usadas por Areu Jones, así como se registraron numerosos retiros de su cuenta bancaria.
La fiscal estatal Katherine Fernandez Rundle declaró sobre el caso:
«Con demasiada frecuencia, estos abusos ocurren a puertas cerradas, fuera de la vista del público. Nosotros, aquí en el condado de Miami-Dade, (estamos) utilizando todos los recursos de la Fuerza de Tarea contra la Explotación de Ancianos de la Oficina del Fiscal del Estado y el Departamento de Policía de Miami-Dade, y no permitiremos estas transgresiones, pasar desapercibido e impune. No en nuestra comunidad».
Por su parte, el director de la policía de Miami-Dade, Alfredo Ramírez, dijo en un comunicado que «es desgarrador ver a una de nuestras víctimas más vulnerables, abusada física, psicológica o financieramente».
«Nuestra comunidad de adultos mayores allana el camino del futuro para garantizar que podamos disfrutar de nuestro presente», agregó.