La Primera Secretaria del Partido Comunista en Santiago de Cuba, Beatriz Johnson Urrutia, anunciĂł su compromiso de entregar a los residentes de dicha provincia tres libras de arroz y cuatro de azĂșcar.
La promesa de comida surge justo después del desarrollo de las masivas protestas de los santiagueros, quienes se lanzaron a las calles para denunciar la escasez de alimentos y los frecuentes apagones.
En relaciĂłn a las causas de las manifestaciones y a la soluciĂłn ofrecida por el gobierno, la funcionaria alegĂł: «Estaban inconformes con el suministro elĂ©ctrico y la distribuciĂłn de los alimentos, como la leche para los niños. Ya estĂĄ en distribuciĂłn parcial la canasta bĂĄsica de alimentos y tres libras de arroz y cuatro libras de azĂșcar que estĂĄn pactadas. Hay una gran movilizaciĂłn de dirigentes en funciĂłn de dar respuesta».
Asimismo, aclaró que se «entregan ahora estos alimentos porque es ahora que disponemos de estos recursos».
Lo cierto es que los manifestantes no se dejaron amilanar por la presencia de las autoridades, gritando al unĂsono: «Tenemos hambre», «Patria y Vida» y «No queremos muela». En medio de este complejo escenario, el rĂ©gimen decidiĂł enviar camiones con alimentos a fin de calmar el descontento popular.
La protesta se llevó a cabo en åreas próximas a la sede de la dirección ejecutiva del Partido Comunista de Cuba, en el distrito 3 Antonio Maceo Grajales, en la Carretera del Morro. A través de un perfil oficialista trascendió que el suministro de alimentos se inició en el mismo lugar de la manifestación.
«Las acciones se iniciaron inmediatamente con la distribución de algunos productos alimenticios, las mismas personas y familias presentes lo percibieron en el propio lugar. Acciones que se estaban realizando desde horas tempranas del propio domingo», recalcó el usuario Aris Arias Batalla mediante una publicación realizada en Facebook.
Mientras Jonhson Urrutia pronunciaba su discurso desde la azotea de una casa, los santiagueros la interrumpieron en varias ocasiones cuestionando la veracidad de sus afirmaciones y llegando incluso a gritarle «mentirosa».
Estos hechos ponen de relieve la intransigencia del pueblo cubano ante la aguda crisis econĂłmica que azota a la isla, cuyas nefastas consecuencias no dejarĂĄn de existir con la entrega de tres libras de arroz y cuatro de azĂșcar. Dicha medida constituye solo una alternativa hallada por el rĂ©gimen para paliar la grave situaciĂłn imperante y mantenerse en el poder, evitando asĂ que se cumpla el sueño de muchos: la libertad de Cuba.