Más de un millar de accidentes de tránsito se han producido entre junio y agosto del presente año en la Mayor de las Antillas, que han provocado 543 lesionados y 72 víctimas fatales, según datos de la Dirección General de Tránsito de la Policía Nacional Revolucionaria(PNR), varias son las causas que los han suscitado, como, irresponsabilidad de conductores y peatones, crítico estado de los viales, entre otros, pero lo cierto es que en muchos casos es debido al deficiente estado de los vehículos.
Un nuevo accidente automovilístico ocurrió en las afueras del Hospital General Calíxto García de la capital antillana en el que afortunadamente no hubo fallecidos, aunque se reportan heridos, según una publicación posteada en el grupo de Facebook «ACCIDENTES BUSES & CAMIONES, por más experiencia y menos víctimas».
En las imágenes subidas a la red social el internauta muestra el estado en el que quedó el vehículo, apreciándose las abolladuras de las puertas y la rotura del parabrisas delantero, y asegura que el choque fue contra un ómnibus de la empresa TRANSTUR. De igual forma afirma que en conversación con el inspector de la empresa mencionada anteriormente este le plantea que las bolsas de aire con las que cuenta este tipo de vehículos ´´por alguna razón no se activaron tras el choque´´.
Otro miembro del referido grupo de internet planteó que en el auto´´no se ve ni una bolsa de aire´´ y ´´que el gobierno manda a comprar esos carros baratos sin ningún tipo de seguridad.
Es de conocimiento popular que el régimen cubano, en su afán de aumentar el deteriorado turismo de la isla, realiza compras de automóviles en el extranjero a precios bajos y por ende con poca seguridad para los conductores, lo que provoca este tipo de sucesos. Muchos autos incluso poseen los neumáticos deteriorados por el tiempo que pasan en desuso antes de su puesta en marcha.
Lo cierto es que el gobierno de la isla debe prestar más atención a una de las principales causas de muertes del país, que cada año cobra miles de vidas a familias cubanas, invertir más en el mantenimiento de las carreteras que llevan años destruídas y sin posible solución a corto y mediano plazo, debería además fomentar la educación vial a la población desde edades tempranas y en gran medida establecer un mecanismo de inspección vehicular que permita la circulación de autos en perfecto estado con el objetivo de disminuir los fatídicos accidentes de tránsito que han aumentado hace varios años.