¿Qué ha sido de la potencia médica? Paradigma de la izquierda de América Latina. Cierran los hospitales, envían a los médicos a misiones en el extranjero, para que onerosos ingresos revistan sus arcas; las medicinas escasean, y a los galenos los gradúan en los últimos años aunque repitan el curso.
El país ha perdido en los últimos tiempos, un tercio de la capacidad de hospitalización; los pacientes hacen regalos a médicos y dentistas para poder ser atendidos, en ocasiones muchas operaciones no se pueden realizar por falta de cirujanos, esterilización, indumentarias, etc…; médicos han abandonado la profesión para vender artesanías, o ser chófer de un auto y ejercer como taxi (boteros); se incrementan las epidemias, y fármacos de primera orden brillan por su ausencia en la farmacias cubanas.
Desde 2010 a la fecha se han clausurado 64 hospitales a lo largo y ancho de Cuba.
El castrismo vendió al mundo que el fruto de la revolución marxista-leninista, que ellos pudieron llevar a la praxis, era la “potencia médica” que comprendía salud gratuita, así como educación libre de costo.
Los latinoamericanos nos han envidiado durante años, a nosotros los cubanos, creyendo que en el paraíso que Fidel Castro erigió nada faltaba, y todos éramos iguales.
Aun cuando la depauperación del sistema económico cubano es fehaciente, el sistema de Naciones Unidas y millones de personas en el mundo le siguen rindiendo culto, y creyendo ciegamente en el mito de la revolución cubana, y ven el socialismo como un modelo sustentable, que desean para ellos.
Si esto no fuera así, en Venezuela no hubiese triunfado Hugo Chávez democráticamente, en Bolivia no se hubiese hecho del poder Evo Morales, Rafael Correa no hubiese sido presidente de Ecuador; y en México ahora no estarían pensado en votar por Andrés Manuel López Obrador, todos lobos de la misma camada.
El mejor producto de marketing político-ideológico de Fidel Castro, fue el dueto salud pública-educación gratis.
Castro I ejerció como un maestro de la propaganda, y puso en uso la vieja técnica de decir sólo parte de la verdad; y no la verdad completa.
A partir de los años 60 hasta 1991, en Cuba los servicios de salud pública pudieron expandirse incluso hasta las áreas rurales; ¿qué sucedió después? Cuando se derrumbó el campo socialista, se acabó el financiamiento de la salud pública. Lo que nos hace pensar: ¿de quién eran los logros de Fidel, o de la poderosa URSS?
Ahondemos en la falacia castrista:
La revolución no era capaz de soportar los considerables gastos de salud pública para todos, el propósito verdadero no era cuidar de los nacionales, sino legitimar la dictadura con dinero extranjero, y el plan real era exportar servicios médicos, y no ayudar a los países pobres.
(Con información de Diario de Cuba)