El régimen cubano volvió a responsabilizar a Washington por la inflación de bienes y servicios y la baja producción de alimentos en la Mayor de las Antillas. El titular de la Industria Alimentaria en el país, Manuel Sobrino en declaraciones a la estatal Mesa Redonda Informativa, aseguró que EEUU mantiene una «persecución obstinada» a todas las actividades comerciales que realiza la Isla.
«Los avatares de la vida cotidiana, el impacto de todo lo que estamos enfrentando, no aparta a la Industria Alimentaria Cubana del compromiso que tiene con el desarrollo del país hasta 2030. Trabajamos en un grupo de proyectos para tributar a la satisfacción creciente de alimentos para nuestro pueblo, con la calidad requerida», aseveró el vocero de la dictadura.
Sin embargo, después de que estuvo varios minutos hablando de todos los supuestos planes que tiene la Industria Alimentaria, dijo el «escenario es muy complejo» a causa del «recrudecimiento del bloqueo de EEUU a nuestro país, y la persecución obstinada a todo lo que hace Cuba para desarrollarse y salir adelante, impacta en el día a día el trabajo de la Industria Alimenticia», indicó.
Sobrino reiteró el manido argumento que el régimen cubano ha usado durante décadas, al referirse a la «política genocida» del gobierno estadounidense para con Cuba, una justificación que no es nueva para ningún cubano, y que sirve al desgobierno de la Isla para mantener a todo el país en el estancamiento económico y preso del subdesarrollo.
Asimismo mencionó al alza de los precios de los productos en los mercados internacionales, y la guerra en Europa, que a su juicio también «ha incidido en los precios de los alimentos en Cuba».
«Un litro del aceite que se vende [de manera racionada] en Cuba supera los dos dólares; y la soya, una materia prima que usa la industria, hace apenas un año valía 400 USD, ahora cuesta 640 USD la tonelada», lamentó el funcionario.
Sobrino no se atrevió a mencionar de manera explícita la invasión de Rusia a Ucrania, para continuar solapando el apoyo cubano a Moscú en esta contienda.
El denominado ministro tampoco reveló que pese al embargo, Estados Unidos es la nación que mayor comercio tiene con Cuba, y es el país que exporta la mayor cantidad de pollo que la Mayor de las Antillas vende a su población a un precio mucho más alto que el paga por importar el producto alimenticio.
Solo se limitó a quejarse de que Cuba en la actualidad debe pagar pagar más por el pollo, y depositar 1,300 USD por cada tonelada, cuando en 2022 la misma cantidad costaba alrededor de 900 dólares.
Mientras tanto, datos recientes de la estatal Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI), confirmaron que la inflación sigue descontrolada en el país caribeño, donde «solo los precios de la carne de cerdo y el arroz suponen en mayo casi el 30% del aumento mensual del costo de los alimentos», recogió Diario de Cuba.
El pasado mes, la inflación en el mercado estatal de la Isla se situó en el 45,48%, frente al 26,16% del mismo mes de 2022 y al 45,36% de abril de 2023.
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