Según una encuesta realizada por Cubadata hace unos meses, un 47.2% de los cubanos entrevistados dejó de alimentarse un día porque la comida no alcanzaba para todos. Muchas familias se reinventan a diario que van a llevar a la mesa, algunos han dejado de comer platos fuertes en el almuerzo o reducir la cantidad de alimentos al servir, comprar alimentos menos nutritivos como croquetas explosivas, o jamonadas vencidas por poner ejemplos.
Los alimentos de la libreta a pesar de que no duran nada en la mesa del cubano, cada día tiene menos productos; el pollo y el huevo se dejó de entregar en varios municipios por meses, principales fuentes de proteínas de las familias cubanas. Sin embargo el estado no toma ninguna medida que pueda volcar esa situación, todo lo contrario celebra elegantes eventos gourmet para los grupos selectos.
En esta ocasión una cubana tuvo el dinamismo de preparar el típico plato cubano «ropa vieja», pero con una diferencia, en vez de emplearse el ingrediente original de carne de res, desaparecida de Cuba hace años, empleó para ello cáscara de plátanos. La antillana conoció de la desconocida receta en un grupo de Facebook nombrado «Recetas desde el corazón», donde se aprecian algunos platillos y formas de preparación adaptadas a la situación de carencias del pueblo cubano. La joven conoció que la receta la conoció cuando una mujer en una cola le explicaba a otra que no tenía nada más para alimentar a sus hijos que unos plátanos.
La joven Anet Cazán en la historia de facebook entre otras cosas dijo: » Resulta que hace un tiempo, estando yo en la cola del pan muchacha decía que estaba pensando, había una de estas señoras que sobrevivió al período especial, ella estaba conversando con una muchacha que estaba en la cola con su niño, la muchacha decía que estaba pasando necesidades y que lo único que tenía para comer ese día era el pan que iba a comprar y una mano de plátano burro verde que tenía en la mano. La señora mágica aquella le explicó le explicó a la muchacha que podría aprovechar las cáscaras de los plátanos haciendo ropa vieja.
La joven expone en su escrito que tomó nota de aquella receta mentalmente y se dirigió a su casa para probar la receta. Hirvió los plátanos y después de refrescarse los mismos, le pasó el tenedor obteniendo las tiras deseadas de proteína vegetal. Afirma que las pasó por aceite con puré de tomate y sazones, para finalmente obtener el plato fuerte de ese día.
Las opiniones sobre el tema en el grupo fueron desde las jaranas, hasta terminar las críticas al régimen cubano por tener a un pueblo muriendo de hambre y necesidades. Por ejemplo la usuaria Libia Creagch comentó: «Mis respetos para esa señora y todas aquellas personas que en ese momento se volvieron magas, lamentablemente nos toca a nosotras también obtener ese título».
En tal sentido Gisellis del Río afirmó: » Yo lo oí y no lo quería creer, sin palabras… Dios bendice y protege a todos los cubanos, en nombre de Jesús, Amén».
Ada Montalvan por su parte agregó: «Que tristeza, tenemos que engañarnos nosotros mismos, nada fácil».
La internauta Yune Bueno expresó: «Está lejos de impresionarme para bien, me causa tristeza, esto no es una opción, es una necesidad, no es cultura, es simplemente MISERIA».
Hace solo unos días Cubanet publicó un video donde se observa a un hombre campesino escachando varias semillas de mamoncillo para hacer unos «frijoles», debido a que no tenía para comprarle a su familia. El cubano preparó los sazones con el agua caliente y adicionó los mamoncillos triturados. En tal sentido afirmó el campesino: » ¡Mira lo que tienen que hacer los cubanos de a pie, mientras que la cúpula del gobierno se alimenta comiendo langosta y buenas comidas, y pidiéndole esfuerzo al pueblo!». El señor en el video pregunta a su familia que almuerza junto a él: «¿Qué sabor tiene esto? y le responden «frijol colorado». Preguntó a su familia si estaba bueno y le afirmaron que sí con la cabeza.