El científico cubano Ariel Ruiz Urquiola hablará ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU este martes 30 de junio, luego de una huelga de hambre exigiendo ser escuchado para testimoniar como víctima de las atrocidades del régimen de La Habana.
Pero opositores cubanos alertan que Ruiz Urquiola podría ser boicoteado por los diplomáticos del Gobierno cubano, en ese organismo internacional, como ha pasado en otras ocasiones, reporta Martí Noticias.
Un comunicado de la disidencia cubana indica «él, como intelectual brillante que es, podrá hablar sobre las violaciones graves y sistemáticas de los derechos humanos que sufre el pueblo cubano en su conjunto. Pero no sólo eso: también podrá ratificar de viva voz las denuncias que ha formulado valientemente desde la misma Cuba por las violaciones que él personalmente y sus familiares han sufrido a manos de los agentes del régimen castrista».
En un segundo apartado, advierten: «conocemos las fullerías que en ocasiones similares anteriores han perpetrado los ‘diplomáticos’ del régimen cubano. Nos estamos refiriendo, por ejemplo, al bochornoso escándalo que ellos escenificaron en la reunión celebrada en la sede del Consejo Económico y Social de la ONU, en Nueva York, el 20 de octubre de 2018».
«Expresamos nuestra esperanza de que, durante la declaración del doctor Ruiz Urquiola, no se toleren desafueros semejantes. También confiamos en que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU no se limite a escuchar al profesor, sino que también actúe y adopte decisiones pertinentes, que se ajusten a sus planteamientos. Esperamos que, en base no sólo a las declaraciones que formule Ruiz Urquiola, sino también a las otras muchas que se han formulado a lo largo de los años en foros análogos, países democráticos sancionen la violaciones de los derechos humanos perpetradas por el régimen castrista», añaden.
Para conseguir esta oportunidad ante Naciones Unidas, Ruiz Urquiola enfermo de VIH por culpa del Gobierno cubano, quien le inoculó el virus, asegura el biólogo, tuvo que hacer una huelga de hambre y sed de cinco días frente a la Oficina de la Alta Comisionada del organismo, la ex presidenta chilena Michelle Bachelet.