Hace meses atrás el gobernador de la Florida, Ron DeSantis aprobó una ley que recrudece las sanciones para quienes conducen sin licencia válida, estén suspendidas o canceladas. A partir del 1 de julio pasado esta norma entró en vigor lo que debe contribuir a que los posibles infractores tramiten sus documentos en vez de arriesgarse a conducir sin ellos.
Para obtener un permiso de conducir en los Estados Unidos hay que cumplir varios requisitos entre ellos ser ciudadano estadounidense o ser residente permanente del estado. Además, debes presentar la prueba de identidad y el número de seguro social, así como presentarte a la realización de un examen escrito donde demuestres tus conocimientos sobre la legislación del tránsito y una prueba práctica en la cual se valora tus aptitudes para conducir.
En el caso del estado de la Florida existen requerimientos muy específicos los cuales han sido más estrictos desde que DeSantis asumió el puesto de gobernador. La ley HB-1589 afecta en mayor medida a los inmigrantes indocumentados que no pueden acceder a su documentación en los primeros días en el estado.
La norma jurídica en específico incrementa la sentencia máxima de cárcel para dos o más delitos que va desde 60 días a un año de cárcel. Así mismo se impone una sentencia mínima obligatoria de 10 días de prisión por tres o más delitos. La primera infracción se considera delito menor de segundo grado, la segunda falta como delito menor de primer grado y a partir de la tercera se cataloga como un delito menor de primer grado por el que deberá cumplir 10 días de prisión como se señaló anteriormente.
La ley detalla que a partir de su puesta en vigor el 1 de julio las licencias de conducción de los estados que se relacionan a continuación son válidas en la Florida si su portador es ilegal en Estados Unidos:
- Vermont
- Delaware
- Hawai
- Connecticut
- Rhode Island
Las licencias no válidas normalmente tienden a variar constantemente de acuerdo a lo que explica la oficina del gobernador DeSantis. Esto se debe a que periódicamente los demás estados evalúan sus requisitos para conducir de sus residentes.
En el mes de mayo el gobernador dejó claro que el estado del sol no permitirá que los inmigrantes que estén ilegalmente en el país obtengan sus permisos y consideró que la ley que firmó contribuirá a la seguridad de todos los floridanos.
“En Florida, no permitimos que los extranjeros ilegales obtengan licencias de conducir y no reconoceremos las licencias de conducir que las jurisdicciones santuario otorgan a los extranjeros ilegales. Al aumentar las sanciones por conducir sin una licencia válida, la ley que firmé hoy es otra herramienta para ayudar a las autoridades a mantener a los floridanos a salvo de los impactos de la crisis fronteriza”, recalcó el funcionario.
