Volver a Cuba no es una opción a tener en cuenta. Así piensa un matrimonio de cubanos que huyeron de la dictadura para formar una familia en EE.UU.
Tienen una bebé de 1 mes de nacida. Se encuentran en la zona fronteriza de Nuevo Laredo, México, y decidieron, entregarse a los agentes de migración de Estados Unidos y pedir asilo político. La pareja de cubanos se dirigió al puente fronterizo y al entrar la zona de migración los detuvieron.
La madre, compungida, hizo saber el miedo que tiene de regresar a Cuba, donde su vida peligra.
“De seguro nos envían a trabajar en el campo porque ahora no son presos políticos sino presos agrícolas. Allá por todo de quieren tildar de traidor a la patria”.
Llegar a EE.UU es su sueño y no cejarán hasta lograrlo.
“No podemos virar hacia Cuba, allá todo se castiga con la muerte, de una manera u otra buscarán la forma de hacerlo”.
Después de ser entrevistados por los oficiales de migración, estos le dijeron que se llevarían a la niña a una casa de cuidado, en el tiempo que ellos se internarían en una prisión de migración. Cuando vieron esta opción, decidieron virar a México y aguardar otra oportunidad.
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