A pesar de que la propuesta inicial era cortar todos los fondos de ayuda a otros países, el presidente Trump fue persuadido de la importancia de mantener alguna ayuda a la democracia en Cuba y finalmente quedaron $ 20 millones para la isla.
En su sugerencia presupuestaria presentada en mayo, Trump eliminaba las partidas destinadas a Cuba lo que provocó preocupación entre los exiliados cubanos en Estados Unidos.
Desde 1996 el gobierno de Estados Unidos destina fondos en su presupuesto a promover la democracia en Cuba con programas que apoyan los derechos humanos y las iniciativas de la sociedad civil que promueven las libertades básicas.
Desde el año fiscal 2009 hasta el 2012 la administración Obama propuso $ 20 millones anuales para promover la libertad en Cuba y ahora Trump lo incluyó en su presupuesto.