Un cubano con orden de deportación ha calificado como «milagro» que después de presentarse a una cita con el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS por sus siglas en inglés), en una de las oficinas de Miami, fuera liberado, recogió Telemundo 51.
El suceso ocurrido con Guillermo López gana connotación, porque justo ayer miércoles otro cubano que fue a su cita con USCIS, fue arrestado por la agencia migratoria.
También en los últimos días otros cubanos con formato I-220 B al igual que López han sido deportados a la Isla comunista.
Guillermo llegó en balsa al sur de la Florida en 2021, según explicó él no tiene mucho talento para hablar, se pone nervioso al hacerlo, de ahí que no pudiese aprobar la entrevista de miedo creíble para su proceso de asilo político.
López dice haber ido a la oficina de USCIS a entregarse, y ha sido el único hasta ahora de los cubanos con I-220 B que salió ileso, sin ser deportado a Cuba.
Sin embargo, USCIS le mantuvo el grillete, pero corrió con gran fortuna, ya que a todos los están deportando, y él al menos podrá seguir viviendo en Estados Unidos, por ahora.
«Para mi es una bendición estar en libertad…y estar para ella», expresó el cubano que tiene a su hija que cumple 15, viviendo en la Isla.
«No es lo mismo estar aquí y poder ayudarla, que estar trancado y no poder hacer nada por ella», añadió.
Guillermo trabaja legalmente con su primo en la Construcción, ya que cuenta con permiso de trabajo por dos años y número de seguro social en territorio estadounidense.
«Tengo todos mis papeles, no he hecho nada aquí hasta que no me llegaron mis papeles», detalló.
«No he cometido ningún delito, no tengo un ticket de carro, no tengo nada», argumentó.
USCIS le pospuso la cita para el próximo 7 de julio, él cuenta con el formato I-220 B, «prácticamente una sentencia a la deportación».