Una mosca común se convirtió en la improbable estrella del único debate vicepresidencial del miércoles por la noche en Utah cuando se convirtió en el hogar de la melena plateada del vicepresidente Mike Pence.
Pence no pareció darse cuenta o evitó hacer algún gesto después de la mosca que decidió quedarse en su cabeza durante varios minutos mientras debatía sobre su oponente demócrata Kamala Harris.
Además de la mosca el debate transcurrió de una manera más civilizada con ambos candidatos respondiendo sus preguntas con tiempo y con muy pocas interrupciones.
Kamala Harris y Mike Pence expusieron sus puntos en lo que serían los próximos 4 años bajo sus administraciones.
El coronavirus, los taxes, el medio ambiente, la Corte Suprema y una transición política de poder fueron los puntos más importantes que se trataron en el debate.
Ambos candidatos esquivaron algunas preguntas dando evasivas. En el caso de Kamala Harris se negó a responder si apoyaría agregar más jueces a la Corte Suprema y Pence no respondió a si aceptaría la derrota en caso de perder las elecciones.