El Servicio de Ciudadanรญa e Inmigraciรณn de Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglรฉs) ha revelado modificaciones en los tiempos de procesamiento de las peticiones familiares I-130, que afectan a los padres, cรณnyuges y menores dependientes de ciudadanos estadounidenses. Estos cambios complementan las recientes mejoras en la programaciรณn de citas para entrevistas de visas para estos grupos en paรญses latinoamericanos.
Segรบn el abogado de inmigraciรณn Abel Zaldรญvar, hay noticias alentadoras en cuanto al aumento de cupos disponibles para entrevistas en las embajadas de Estados Unidos ubicadas en Mรฉxico y Guatemala. En concreto, las personas cuyos casos fueron aprobados entre noviembre y diciembre de 2023 en Mรฉxico estรกn siendo programadas para entrevistas en enero de 2025. Este avance marca un avance notable, especialmente teniendo en cuenta los retrasos de larga data que se habรญan experimentado anteriormente en esa regiรณn.
De igual manera, Guatemala ha mostrado avances. Los analistas anticipan que paรญses como Cuba y Repรบblica Dominicana tambiรฉn comenzarรกn a ver un aumento en la disponibilidad de citas en los prรณximos dรญas, reflejando las tendencias observadas en meses anteriores.
En una nota negativa, los informes recientes indican que la duraciรณn estรกndar del procesamiento de las peticiones I-130 ha aumentado de 15,5 meses a 16 meses, segรบn la actualizaciรณn mรกs reciente del USCIS. En consecuencia, el 80 % de las solicitudes ahora requieren mรกs de un aรฑo para su resoluciรณn. Esto es preocupante, especialmente si se considera que el tiempo de procesamiento promedio en 2020 fue de solo 8,3 meses.
Los principales factores que contribuyen al aplazamiento son:
- Personal insuficiente: el USCIS carece de la fuerza laboral necesaria para gestionar el alto volumen de solicitudes.
- Reasignaciรณn de fondos: algunos recursos presupuestarios se han trasladado a iniciativas alternativas, incluida la libertad condicional.
- Acumulaciรณn de casos sin resolver: los retrasos constantes de aรฑos anteriores estรกn afectando el rendimiento del sistema.
El procesamiento de las visas I-130 dura en promedio 16 meses, mientras que las visas K-1 suelen procesarse en aproximadamente 8,5 meses.
Zaldรญvar aclara que la distinciรณn surge porque las visas K-1 dividen el procedimiento en fases que ocurren tanto dentro como fuera de Estados Unidos, mientras que las visas I-130 exigen que todo el proceso se realice desde el extranjero.
El abogado de inmigraciรณn indicรณ que sin un aumento notable en el presupuesto del USCIS o una ampliaciรณn de personal, los tiempos de procesamiento podrรญan seguir alargรกndose. En este sentido, muchos anticipan que podrรญan elevarse a 18 o incluso 20 meses para 2025. Ademรกs, un aumento en el examen de solicitudes podrรญa complicar aรบn mรกs las cosas.