Según reportaron miembros de agencias de prensa independientes de La Habana y Santa Clara, el control y las estrictas medidas por el luto al exgobernante Fidel Castro terminaron en detenciones y decomisos para varios periodistas independientes de la isla.
Desde el 28 de noviembre se encuentran detenidos en el Departamento Técnico de Investigaciones de San José, el director del boletín “Cimarrón”, Manuel Guerra Pérez, y el editor Lisbey Mora, acusados de «propaganda enemiga» y «desacato».
“Les pidieron a los familiares y a la esposa de Manuel Guerra Pérez que entregaran las cámaras digitales, las laptops, las computadoras, los medios de trabajo de ellos», confirmó a Radio Martí el periodista independiente Mario Echevarría.
En Santa Clara detuvieron a los periodistas independientes Adrián del Sol y Robeisy Zapata, de la agencia Santa Clara Visión, y les retiraron sus equipos de trabajo, incluidos trípode y cámara, detalló el director de esta agencia noticiosa, Guillermo del Sol, desde el centro de la isla.
Del Sol indicó que los equipos no fueron formalmente decomisados. Las autoridades les informaron que quedaron en calidad de depósito y que debían hacer una reclamación con la propiedad de los equipos para obtenerlos de vuelta.
Otro periodista habanero, Carlos Manuel Figueroa Álvarez, colaborador de CubaNet, continúa tras las rejas desde hace un mes y sus colegas no saben a ciencia cierta en qué centro de detención lo tienen recluido.
Las detenciones contra activistas también se han incrementado, según advirtió a Martí Noticias el líder de Unión Patriótica de Cuba, José Daniel Ferrer.
“Durante los días de duelo nacional por la muerte del dictador Fidel Castro tuvimos 19 detenidos, la mayoría en las provincias orientales”, insistió.