(EFE). El primer vicepresidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, posible heredero de Raúl Castro, apostó el domingo por la “continuidad” del socialismo y la Revolución ante el relevo generacional en el poder que se dará en el país a partir de febrero del 2018, cuando el actual mandatario abandone la presidencia.
“Yo no concibo las rupturas en nuestro país, creo que ante todo tiene que haber continuidad. Hay muchas personas muy jóvenes propuestas como delegados (concejales)”, indicó Díaz-Canel, previsible heredero de Castro en la presidencia, ante los medios después de votar en los comicios municipales que se celebran el domingo en Cuba.
Preguntado por la posibilidad que sea en unos meses el próximo presidente del país, Díaz-Canel eludió pronunciarse al respecto pero apuntó que en el futuro “habrá presidentes en Cuba siempre defendiendo la Revolución y serán compañeros que saldrán del pueblo, los elegirá el pueblo”.
Más de ocho millones de cubanos fueron convocados el domingo a las urnas para votar por los delegados municipales del poder popular, una figura que equivale a la del concejal, y muchos de ellos serán candidatos a diputados a la Asamblea Nacional en los próximos meses.
Estos comicios marcan el inicio del proceso electoral que culminará con la elección de un nuevo parlamento que deberá ratificar el próximo 24 de febrero del 2018 al nuevo presidente de Cuba, a propuesta del Consejo de Estado, lo que supondrá un recambio generacional en el poder después de casi 60 años de castrismo.
Estos comicios se celebran al día siguiente del primer aniversario de la muerte del líder histórico de la Revolución, Fidel Castro, motivo por el que Díaz-Canel consideró que es una “jornada electoral cargada de emoción y pasión para la gente revolucionaria”.
“Hoy estamos haciendo un voto por la Revolución, la patria y el socialismo”, un voto que enviará “un mensaje a los que quieren hacer cambiar o imponer condiciones de que este es un pueblo que no se va a doblegar, que defendió hace mucho tiempo su soberanía e independencia”, aseveró el primer vicepresidente del país.
Sobre las nuevas tensiones con Estados Unidos, que impuso recientemente nuevas sanciones económicas sobre la isla, Díaz-Canel señaló que Cuba sigue abierta a mantener relaciones con ese país, pero “sin condicionamientos” y basadas en la “bilateralidad, la igualdad, el respeto y la cooperación”.
“Ese futuro (en la relación Cuba-EEUU) no depende de nosotros depende de ellos, depende de la actitud que ellos asuman”, indicó el vicepresidente, que criticó el cambio de postura de la administración de Donald Trump que “ha recrudecido el bloqueo y ha frenado el camino avanzado” con el Gobierno de Barack Obama.
En la elección del domingo, se postulan en toda la isla 27,221 candidatos para ser delegados de las asambleas municipales, de los que el 35 % son mujeres y el 19 % jóvenes.